Es imposible precisar el número de árabes que llegaron a Colombia. Los registros de las autoridades portuarias colombianas son escasos antes de 1.930 y los datos disponibles de las autoridades sirias, libaneses y palestinas, dicen muy poco sobre el destino final de sus inmigrantes. Evidentemente, las grandes masas de emigrantes que llegaron a los Estados Unidos y a otros países de Sur América y Brasil, no tienen paralelo en Colombia. Es más apropiado hablar de un flujo sostenido entre 1890 y 1930. En este último año, uno de los primeros que ofrece cifras publicadas confiables, sólo unos 300 libaneses, palestinos y sirios, llegaron a Colombia a los puertos de Barranquilla, Buenaventura y Cartagena. Las cifras de 19311 son similares. Las posteriores comienzan a disminuir: solo 100 inmigrantes entraron a Barranquilla en 1937. Cuando las restricciones impuestas comenzaron a tener efecto en el año siguiente, la cifra se redujo a la mitad. Entre los años 1940 y 1943 solamente arribaron a Colombia 104 sirio libaneses.
Los censos también suministran informaciones sobre el número de extranjeros que viven en Colombia. Así el censo de 1938 indico que solo 680 árabes residían en Barranquilla. Según el mismo censo, para ese año en el departamento de Bolívar, el dato para la categoría “asiáticos con restricciones” fue de 1.070.
Como puede apreciarse, es muy difícil estimar con certeza las dimensiones de la población arabe en Colombia. Con frecuencia había tantos arribos como salidas en cualquier puerto en un año dado, y la categoría “inmigrante”, como fue el caso en muchos países de América Latina, era aplicada únicamente a los viajeros de segunda o tercera clase. Los censos también presentan la limitación de que solo incluían a los extranjeros residentes en el país y no a sus descendientes, muchos de ellos considerados ya nacionales, o por nacimiento en el país, o por naturalización. No obstante, al analizar en conjunto la información y comparada con las estadísticas disponibles sobre la población sirio libanesa y sus descendientes en Colombia, un estimativo entre 5.000 y 10.000 para 1930 y entre 20.000 y 30.000 para 196 parece aceptable. Teniendo en cuenta una relativa alta tasa de natalidad y la juventud de los inmigrantes, para la época actual podría presentarse una cifra tentativa de 50.000 personas de origen sirio libanés en Colombia.
Un estudio sobre la comunidad arabe editado por Ahmed Mattar y publicado por primera vez en 1945, identifico 900 libaneses, sirios y palestinos, de los cuales las dos terceras partes eran cabezas de familia residentes por ese entonces en Colombia. Esta cifra indicaría una población total de 5.000 teniendo en cuenta que la mayoría de los inmigrantes estaban casados y tenían familia numerosa. Las cifras del estudio de Mattar son inferiores a las estimadas arriba, sin embargo su guía es incompleta. Algunos municipios con buen número de población arabe, tales como El Banco u Ocaña, fueron omitidos, así como muchos nombres de familias establecidas en otros pueblos. No obstante, la publicación de Mattar, que trae información sobre la comunidad sirio libanesa en Colombia en algunas poblaciones e incluye detalles sobre los miembros de familias y lugares de origen, es una fuente de consulta muy útil.