La expansión árabe
Muerto Mahoma (632), el gobierno de Arabia y la nueva religión, fue ejercido sucesivamente por califas (sucesores), elegidos entre los familiares e íntimos de Mahoma, porque no dejo hijos varones. Los cuatro primeros califas consolidaron la unificación árabe y se lanzaron sobre territorios de los imperios bizantino y persa. Entre el 644 y el 654 conquistaron Palestina, Siria y Egipto a los bizantinos, y Mesopotamia e Irán al Imperio Persa, hecho que contribuyo a su derrumbamiento.
Norte de África
Años después, la caballería de árabes, sirios y otros pueblos convertidos, continúo la conquista del norte de África, la península ibérica, liquidando el reino de los visigodos, y llego hasta las Galias, donde los francos los detuvieron en la batalla de Poitiers (73). En el Oriente, los conquistadores fueron rechazados en Constantinopla con el fuego griego, pero en cambio, se extendieron a Armenia, Turquestan, el actual Afganistán y la llanura del Indo. El Imperio árabe abarco desde el Atlántico hasta India, y por el norte, desde los Pirineos y el Turquestán hasta el África subsahariana.
Europa, Asia y África
Las conquistas árabes trajeron consecuencias decisivas para Europa, Asia y África: el Mediterráneo dejo de ser el mar que durante un milenio había favorecido la unidad cultural e imperial, que quedo casi todo en poder musulman: la Europa cristiana permaneció cercada por el Islam. el Imperio Bizantino se redujo territorialmente, influyendo en que perdiera su carácter de Imperio Romano. Las sociedades romano germánicas aceleraron su empobrecimiento y ruralización pues se acabo el intercambio económico con el Oriente.
Cercano Oriente y norte de África
En el Cercano Oriente y norte de África, el Islam borro totalmente las influencias griega, romana y cristiana de tantos siglos. La nueva civilización, netamente oriental, dio unidad religiosa y lingüística a pueblos de Asia y África. La base del Islam fue la religión y la lengua de los árabes; los demás elementos fueron asimilaciones y transformaciones de las culturas bizantina y persa.