Las visiones y revelaciones de Mahoma se encuentran registradas en el Korán, el cual, juntamente con las profecías no escritas o Sunna, llegaron a ser las bases de la nueva religión que en todo momento fue militante y dispuesta a conquistar el mundo para Alá.
Las Conquistas
Hay muchos pasajes en el Korán que exhortan a los fieles a pelear por la defensa y avance de la religión de Alá, prometiendo recompensas para aquellos que responden positivamente y castigos para aquellos que rehúsen pelear los “califas”, o sucesos de Mahoma, se lanzaron en fanáticas campañas militares para conquistar el mundo en el nombre de Alá y su profeta Mahoma. En solo veinticinco años después de la muerte del profeta, ellos llegaron a controlar una área mayor que la del Imperio Romano. Por el año 795 a. de J.C., los musulmanes habían conquistado, no solo todo el territorio del cercano Oriente, sino también África del Norte y España. Por medio de lo que ahora nos parece un movimiento gigante, sus ejércitos amenazaron Europa, vía Asia Menor por el este y España por el occidente, pero gracias a dos batallas estratégicas fueron detenidos. En 717-718 fueron derrotados por el emperador griego Leo III mientras procuraban sitiar la ciudad de Constantinopla; y en 732 Carlos Martel, jefe de los francos, los derroto en la batalla de Tours siendo esparcidos a través de los Pirineos hacia Francia.
Luego los musulmanes penetraron en Asia Central y la India dando origen al reino musulmán el cual permaneció por varias centurias. Durante la Edad Media los turcos y mongoles irrumpieron hacia el occidente desde el Asia adoptando el islamismo como su religión y creando grandes imperios. Constantinopla cayó finalmente en las manos de los muslines turcos en 1453 y de este modo los turcos penetraron en Europa.
Las Cruzadas.
Mientras tanto, las Cruzadas tomaron lugar desde 1095-1291 como una expresión del espíritu del cristianismo europeo medieval y la caballería. Los motivos fueron los siguientes:
Hacer posible el peregrinaje de los cristianos a la tierra Santa sin dificultad.
Rescatar la tierra Santa del dominio de los infieles musulmanes.
Proteger el Imperio Romano Cristiano Oriental en Grecia, los Balcanes y Asia Menor, de caer en manos de los turcos.
Estimular la unidad entre los cristianos orientales y occidentales de Europa.
Al contrario, sin embargo, las Cruzadas desataron pasiones y crueldad, prejuicio, aventura y voracidad, como también heroísmo e idealismo de parte de los cruzados. La tierra nunca fue recuperada completamente de los musulmanes. El Imperio Romano Oriental estaba debilitado y sucumbió bajo el poder de los turcos en 1453, como ya se ha dicho. La fractura entre el cristianismo oriental y occidental se hizo mas penetrante. Además el trabajo misionero entre los musulmanes se hizo mucho mas difícil a causa del odio que los cruzados engendraron entre los adherentes de estas dos religiones. La vida disoluta que vivieron los cristianos mientras estuvieron en Palestina confirmo a los musulmanes en su creencia de que su fe era superior al cristianismo.
Los Cristianos bajo el Dominio Musulmán
España fue recuperada por los cristianos a través de un proceso lento que culmino en 1492. Sin embargo, un vasto territorio, a lo menos nominalmente, permaneció en poder de los musulmanes. En realidad muchos de los grandes centros del cristianismo antiguo en el norte de África, Palestina y Asia Menor quedaron incluidos en el dominio musulmán. ¿Cómo lo pasaron los cristianos bajo el dominio islámico?.
Bajo el calor de la conquista hubo destrucción de iglesias y templos, con conversiones forzadas, pero aun cuando los musulmanes suprimieron todo lo que olía a paganismo, generalmente toleraron a los cristianos y judíos considerándoles como “gentes del Libro”, gentes que tenían una revelación relacionada con la de los musulmanes, aunque inferior. Los cristianos podían retener su religión, pero fueron sujetos a impuestos especiales. Ellos Vivían como un pueblo subyugado, un pequeño estado dentro del estado musulmán.
Varias leyes fueron impuestas sobre los cristianos una de las mas severas fue la que prohibía convertir a ningún musulmán al cristianismo. El otro lado de la moneda expresa la absoluta prohibición a los musulmanes de aceptar el cristianismo. Para ambos casos la pena de muerte fue impuesta. En tales circunstancias el trabajo evangelizador era imposible, pues todo converso se exponía a ser ejecutad. En tal medio, las iglesias cristianas ubicadas en territorio musulmán murieron gradualmente y las que sobrevivieron se mantuvieron replegadas, como generalmente sucede con las pequeñas minorías.
Divisiones Sectarias y ortodoxia
El islamismo ha sufrido, desde el comienzo, fracturas y divisiones sectarias, aun cuando también ha mantenido un admirable grado de unidad. La más seria división fue la llamada shia o cites, quienes se separaron de la reconocida sucesión del liderazgo. Los cites contendieron, que el verdadero sucesor de Mahoma no era su pariente Abu Bakú, el califa reconocido, sino el primo y yerno de Mahoma. Los cites que se encuentran divididos entre ellos mismos, existen hasta hoy y cuentan con un número aproximado de 25.000.000 desparramados principalmente en Irak, Irán y el Oriente.
Los musulmanes ortodoxos, que componen la vasta mayoría del islamismo, son conocidos como sunnis o seguidores de la sunna.
Además, se encuentran los musulmanes místicos o sufis, con un tipo de religión similar al misticismo como se practica en todas partes. Los sufis no son considerados una secta o división, aun cuando en algunos casos ellos tienen sus propias órdenes religiosas.
Las Conquistas
Hay muchos pasajes en el Korán que exhortan a los fieles a pelear por la defensa y avance de la religión de Alá, prometiendo recompensas para aquellos que responden positivamente y castigos para aquellos que rehúsen pelear los “califas”, o sucesos de Mahoma, se lanzaron en fanáticas campañas militares para conquistar el mundo en el nombre de Alá y su profeta Mahoma. En solo veinticinco años después de la muerte del profeta, ellos llegaron a controlar una área mayor que la del Imperio Romano. Por el año 795 a. de J.C., los musulmanes habían conquistado, no solo todo el territorio del cercano Oriente, sino también África del Norte y España. Por medio de lo que ahora nos parece un movimiento gigante, sus ejércitos amenazaron Europa, vía Asia Menor por el este y España por el occidente, pero gracias a dos batallas estratégicas fueron detenidos. En 717-718 fueron derrotados por el emperador griego Leo III mientras procuraban sitiar la ciudad de Constantinopla; y en 732 Carlos Martel, jefe de los francos, los derroto en la batalla de Tours siendo esparcidos a través de los Pirineos hacia Francia.
Luego los musulmanes penetraron en Asia Central y la India dando origen al reino musulmán el cual permaneció por varias centurias. Durante la Edad Media los turcos y mongoles irrumpieron hacia el occidente desde el Asia adoptando el islamismo como su religión y creando grandes imperios. Constantinopla cayó finalmente en las manos de los muslines turcos en 1453 y de este modo los turcos penetraron en Europa.
Las Cruzadas.
Mientras tanto, las Cruzadas tomaron lugar desde 1095-1291 como una expresión del espíritu del cristianismo europeo medieval y la caballería. Los motivos fueron los siguientes:
Hacer posible el peregrinaje de los cristianos a la tierra Santa sin dificultad.
Rescatar la tierra Santa del dominio de los infieles musulmanes.
Proteger el Imperio Romano Cristiano Oriental en Grecia, los Balcanes y Asia Menor, de caer en manos de los turcos.
Estimular la unidad entre los cristianos orientales y occidentales de Europa.
Al contrario, sin embargo, las Cruzadas desataron pasiones y crueldad, prejuicio, aventura y voracidad, como también heroísmo e idealismo de parte de los cruzados. La tierra nunca fue recuperada completamente de los musulmanes. El Imperio Romano Oriental estaba debilitado y sucumbió bajo el poder de los turcos en 1453, como ya se ha dicho. La fractura entre el cristianismo oriental y occidental se hizo mas penetrante. Además el trabajo misionero entre los musulmanes se hizo mucho mas difícil a causa del odio que los cruzados engendraron entre los adherentes de estas dos religiones. La vida disoluta que vivieron los cristianos mientras estuvieron en Palestina confirmo a los musulmanes en su creencia de que su fe era superior al cristianismo.
Los Cristianos bajo el Dominio Musulmán
España fue recuperada por los cristianos a través de un proceso lento que culmino en 1492. Sin embargo, un vasto territorio, a lo menos nominalmente, permaneció en poder de los musulmanes. En realidad muchos de los grandes centros del cristianismo antiguo en el norte de África, Palestina y Asia Menor quedaron incluidos en el dominio musulmán. ¿Cómo lo pasaron los cristianos bajo el dominio islámico?.
Bajo el calor de la conquista hubo destrucción de iglesias y templos, con conversiones forzadas, pero aun cuando los musulmanes suprimieron todo lo que olía a paganismo, generalmente toleraron a los cristianos y judíos considerándoles como “gentes del Libro”, gentes que tenían una revelación relacionada con la de los musulmanes, aunque inferior. Los cristianos podían retener su religión, pero fueron sujetos a impuestos especiales. Ellos Vivían como un pueblo subyugado, un pequeño estado dentro del estado musulmán.
Varias leyes fueron impuestas sobre los cristianos una de las mas severas fue la que prohibía convertir a ningún musulmán al cristianismo. El otro lado de la moneda expresa la absoluta prohibición a los musulmanes de aceptar el cristianismo. Para ambos casos la pena de muerte fue impuesta. En tales circunstancias el trabajo evangelizador era imposible, pues todo converso se exponía a ser ejecutad. En tal medio, las iglesias cristianas ubicadas en territorio musulmán murieron gradualmente y las que sobrevivieron se mantuvieron replegadas, como generalmente sucede con las pequeñas minorías.
Divisiones Sectarias y ortodoxia
El islamismo ha sufrido, desde el comienzo, fracturas y divisiones sectarias, aun cuando también ha mantenido un admirable grado de unidad. La más seria división fue la llamada shia o cites, quienes se separaron de la reconocida sucesión del liderazgo. Los cites contendieron, que el verdadero sucesor de Mahoma no era su pariente Abu Bakú, el califa reconocido, sino el primo y yerno de Mahoma. Los cites que se encuentran divididos entre ellos mismos, existen hasta hoy y cuentan con un número aproximado de 25.000.000 desparramados principalmente en Irak, Irán y el Oriente.
Los musulmanes ortodoxos, que componen la vasta mayoría del islamismo, son conocidos como sunnis o seguidores de la sunna.
Además, se encuentran los musulmanes místicos o sufis, con un tipo de religión similar al misticismo como se practica en todas partes. Los sufis no son considerados una secta o división, aun cuando en algunos casos ellos tienen sus propias órdenes religiosas.