Primero: El politeísmo (Shirk) en la adoración a Alá.
Alá el Altísimo dice:
“Por cierto que Alá no perdona que se le asocie nada. Pero perdona lo que no es eso (Shirk) a quien quiere...” (4:116)
Y el Altísimo dice:
“quien atribuya copartícipes a Alá, Él le vedará el Paraíso y su morada será el Infierno. Los inicuos jamás tendrán auxiliadores”. (5:72)
Y aquí se incluyen las súplicas a los muertos, solicitar su protección, hacer votos, y sacrificar en sus nombres.
Segundo: Quien hace entre él y Alá intermediarios, suplicándoles, pidiéndoles salud, depositando el ellos confianza, es incrédulo (Kafir) acorde al consenso unánime de los sabios.
Tercero: Aquel que no considere a los politeístas incrédulos o dude sobre su incredulidad o acepte como verídico su doctrina, habrá descreído (abandonado el Islam).
Cuarto: Quien crea que una guía diferente a la del Profeta r sea más completa, o que su juicio es mejor, como los que prefieren el juicio (gobierno) de los ídolos, es un incrédulo.
Quinto: Quien odia o aborrece cualquiera cosa dictaminada por el Mensajero r, aunque actúe acorde a eso, por cierto que es un incrédulo. Sobre esto Alá el Altísimo dice:
“Ello porque repudiaron lo que Alá reveló, y entonces todas sus obras se perderán”. (47:9)
Sexto: Quien se burle de cualquier aspecto de la religión del Mensajero r o sus recompensas, o sus castigos, habrá caído en la incredulidad. La evidencia de esto es el dicho de Alá el Altísimo:
“¿Acaso os burláis de Alá, Sus preceptos, y de Su Mensajero? No os excuséis, por cierto que habéis renegado de vuestra fe [al haberos burlado de Alá y Su Mensajero].” (9:65-66)
Séptimo: La magia, como el Sarf1 o el ‘Atf2. Aquel que realice el acto (de magia) o se complazca (de que lo hagan en su beneficio) es un incrédulo. La prueba es el dicho de Alá:
“...Estos no enseñaban a nadie sin antes advertirle: Somos una prueba, no caigas en la incredulidad.” (2:102)
Octavo: Ayudar y apoyar a los idólatras o sus aliados contra los musulmanes. La prueba de esto está en las palabras del Altísimo:
“Quien los tome por aliados será uno de ellos. Es cierto que Alá no guía a los Incrédulos”. (5:51)
Noveno: Quien considere que le es permitido a algunas personas estar exentos de la Shari’ah de Muhammad r, por cierto que es un incrédulo. Dijo el Altísimo:
“Y quien desee otra religión que no sea el Islam, no le será aceptada y en la otra Vida será de los perdedores”. (3:85)
Décimo: Quien desprecia la religión de Alá, no la estudia ni obra acorde a ella. La prueba es el dicho de Alá:
“¿Y quién es más injusto que aquél al que se le mencionan los versículos de su Señor y se aparta de ellos”. (32:22)
No existe diferencia en todos estos puntos mencionado anteriormente entre quien actúe burlonamente, o con seriedad, o por temor, a menos que sea por compulsión. Todos estos casos son de sumo peligro y son las más frecuentes, por lo que el musulmán debe mantenerse alerta para no caer en ellos temiendo por su propio beneficio.
Es decir que quien cometa alguno de estos diez actos que a continuación se mencionaran habrá abandonado el Islam, siendo que si muere antes de arrepentirse habrá muerto como un incrédulo.
1 Sarf: Acto de magia cuyo propósito desunir a los cónyuges.