El ateísmo, muy difundido en estos días entre los seguidores de Marx, Lenín y otras personas, que llaman al ateísmo y a la incredulidad con nombres como comunismo, o socialismo, o partido baasista, u otros nombres, pero sus bases son las mismas: No existe un dios, lo importante de la vida es lo material, no hay resurrección, niegan el paraíso y el infierno, y no creen en ninguna religión. Quien lea sus libros y los estudie comprende esto sin dudar. No hay dudas de que esta doctrina contradice claramente a todas las religiones de origen divino, y quien así lo haga su castigo será en la tierra y en la otra vida.
De entre las doctrinas que contradicen a la verdad tenemos a Al-Batiniah y algunos sufís, quienes asocian a Alá en su Señorío, argumentando que algunas personas que ellos llaman Auliah (amigos de Alá) tienen ingerencia en el dominio que Alá tiene sobre el universo, y los llaman también Aqtaab, o Autaad o Aghuaz entre otros nombres que han inventado para sus nuevos dioses. Esta forma de idolatría es peor y mas vergonzosa que la de los árabes de la época pagana, ya que estos no asociaban a Alá en su control del universo, sino que asociaban en el culto, y solo asociaban cuando se encontraban en situación de facilidad, siendo que ante las dificultades pedían solo a Alá, como dice Alá:
“Cuando se embarcan [y son azotados por una tempestad] invocan a Alá con sinceridad [reconociendo que sólo Él debe ser adorado], pero cuando les ponemos a salvo llevándoles a tierra, Le atribuyen copartícipes [nuevamente]”. (29:65)
En cuanto a Su Señorío ellos reconocían a Alá como único. Como dice Glorificado sea:
“Y si les preguntas quién los ha creado, te dirán: Alá...” (43:87)
Y dijo el Altísimo:
“Pregúntales: ¿Quién os sustenta con las gracias del cielo y de la tierra? ¿Quién os agració con el oído y la vista? ¿Quién hace surgir lo vivo de lo muerto y lo muerto de lo vivo? ¿Quién tiene bajo su poder todas las cosas? Responderán: ¡Alá! Di: ¿Acaso no Le vais a temer?”. (10:31)
Los versículos sobre este tema son innumerables.
En cuanto a los idolatras de hoy día, superan a los de los antepasados en dos puntos:
Primero: Algunos asocian a Alá en el Señorío (Rububiah).
Segundo: Asocian tanto en tiempos de facilidad como en momentos de dificultad, como claramente puede advertir quien los observe cuando visitan la tumba de Al-Hussein, Al-Badawi, y otros en Egipto, o la tumba de Idrius en Adén, o Al-Haady en Yemen, o Ibn Arabi en Siria, o la del Sheij Abdul-Qader Al-Yailani en Irak y otras tumbas famosas, donde se llega al extremo y al fanatismo de conceder muchos de los derechos de Alá, pero son pocos los que les desmienten y les explican a todas esas personas el verdadero Monoteísmo (Tawhid) que fuera traído por nuestro profeta e y antes que el todos los profetas anteriores, que con todos ellos sea la Paz y las bendiciones de Alá.
Le pedimos a Alá Glorificado sea, que los regrese al camino correcto, y que aumenten entre ellos aquellos que inviten a la verdad, y que conceda a las autoridades de los musulmanes y a los sabios luchar contra estas demostraciones de idolatría (Shirk), y que pueda ser desterrada finalmente, porque ciertamente esta cerca y escucha las plegarias de quienes ruegan.