El Islam encomienda a los musulmanes priorizar el bienestar del prójimo por encima del propio, porque esta es una expresión del verdadero amor y la verdadera buena voluntad en el ser humano, cuyos resultados pueden sentirse claramente en una sociedad. El Islam construye y fortalece los lazos del individuo en base a su amor y su vocación de servicio para servir a los demás. Dios dijo, elogiando a aquellos que prefieren el bien del prójimo antes que a sí mismos:
‚Y les prefieren a sí mismos, aunque estén en extrema necesidad. Quienes hayan sido preservados de la avaricia serán los triunfadores‛ (Corán 59:9)
El Islam encomienda buscar la compañía de la gente honesta y recta, y desalienta permanecer en la compañía de la gente corrupta. El Profeta dio un excelente ejemplo explicando las consecuencias de las relaciones con la gente recta o malvada. Él dijo:
‚El ejemplo del compañero honesto y el malvado es como quien tiene como amigo a un vendedor de perfumes o a un herrero. El vendedor de perfumes, ya sea que te dé un poco, le compres algo o no, sentirás un agradable aroma estando con él. Mientras que el herrero, o quema tus ropas con las chispas del fuego o te llenas del olor a humo‛ (al-Bujari).
El Islam ha encomendado a los musulmanes esforzarse en reconciliar los corazones de la gente en tiempos de disputa y desunión. Dios dijo:
‚En muchas de las conversaciones secretas no hay ningún bien, salvo que sean para realizar una caridad, una buena acción o reconciliar a las personas. Quien haga esto anhelando complacer a Dios, le agraciaremos con una recompensa grandiosa‛ (Corán 4:114)
La reconciliación entre la gente trae una gran recompensa, similar a la de la oración, el ayuno y otros actos de culto obligatorios. El Profeta dijo:
‚¿Quieren que les informe de un nivel aún mejor que el ayuno, la caridad, y la oración? Reconcilien los corazones de la gente, porque ciertamente la desunión entre la gente es lo que corrompe la práctica de la religión‛ (Abu Dawud y at-Tirmidhi).
Respecto a esto, el Islam considera que cuando se trata de reconciliar los corazones de la gente, es lícito utilizar alguna estrategia sana y exagerar sobre la voluntad de las personas, o incluso decir una mentira que no resulte dañina. El Profeta dijo:
‚Yo no considero que sea una mentira cuando una persona intenta reconciliar a dos personas diciendo algo que no es exacto o cierto, con el objetivo de reconciliar a la gente en tiempos de guerra o a un esposo y a su esposa‛ (Abu Dawud).
El Profeta también dijo:
‚No es un mentiroso quien intenta reconciliar a dos personas exagerando cosas buenas de ellas‛ (al-Bujari).
Abdur-Rahmán A. Al-Sheha
Abdur-Rahmán A. Al-Sheha